miércoles, 2 de diciembre de 2009

Los Bomberos suspendieron la protesta y se reunieron con sus superiores

El puñado de jóvenes Bomberos Voluntarios de Basavilbaso que manifestaron durante casi tres horas frente a la plazoleta “San Martín” depusieron su actitud y accedieron a reunirse con Gabino López. El Jefe de los voluntarios hizo saber de la situación institucional y la necesidad de que cada uno de los Bomberos comprendieran que no se podía trasladar a toda la comunidad situaciones que podían ser solucionadas en el seno de la institución. Tras un encuentro de casi una hora las partes lograron un entendimiento y “el cuartel está en orden”, dijo López.
La manifestación causó sorpresa entre los vecinos, especialmente entre los que circulaban por las calles céntricas. El decidido puñado de jóvenes Bomberos Voluntarios escuchó los pedidos de la mismísima Intendente, Blanca Rossi, que en compañía del Secretario de Obras y Servicios Públicos, Oscar Ogguier, solicitó que la protesta no afectaran el tránsito, pero los vehículos se mantuvieron en el cruce de Rogelio Gómez y San Martín hasta se presentó Gabino López que les propuso realizar una reunión en el Cuartel, a lo que accedieron.

El Jefe de los voluntarios Gabino López, en compañía de Marcelo Benítez, hizo saber de la situación institucional y la necesidad de que se comprendiera que no se podía trasladar a toda la comunidad situaciones que podían ser solucionadas en el seno de la institución.

López reprochó que se movilizaran con los vehículos con los que se sale en auxilio de las personas que sufren siniestros, pero además brindó precisiones sobre la tramitación que se está realizando para normalizar institucionalmente a la Asociación de Bomberos Voluntarios de Basavilbaso y que seguramente en los primeros meses del año próximo se realizará una Asamblea. Asimismo destacó que se atienden las necesidades del Cuartel y los miembros activos del Cuerpo Bomberos en la medida de las posibilidades, pero aclaró que los recursos son “muy ajustados”.

En los primeros minutos de la reunión se escuchó un monólogo, en tono muy firme, de López que cuestionó la utilización de las autobombas sin la autorización de las autoridades del Cuerpo de Bomberos, situación que califico de “muy grave”. Luego llegaron al lugar familiares de los jóvenes, en su mayoría menores de edad, con quienes se solidarizaron.

Transcurridos unos veinte minutos el tono de voz bajó considerablemente, una señal inequívoca que las partes comenzaron a entenderse y antes de las 20,45 horas se alcanzó un acuerdo, del que no se conocieron detalles, pero que al parecer satisfizo a las partes que se retiraron del lugar, sin hacer declaraciones, y con gestos menos adustos que con los que ingresaron al cuartel. “El cuartel está en orden”, dijo sonriente López, lo cual quedó demostrado minutos más tarde la sirena del Cuartel se escuchó en gran parte de la ciudad y a los pocos minutos los mismos vehículos que habían sido utilizados en la protesta salieron a gran velocidad en dirección a Rocamora donde un campo de rastrojo había tomado fuego y el eficiente trabajo de los Bomberos logró sofocar.

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